Personalizar las preferencias de consentimiento

Usamos cookies para ayudarle a navegar de manera eficiente y realizar ciertas funciones. Encontrará información detallada sobre cada una de las cookies bajo cada categoría de consentimiento a continuación.

Las cookies categorizadas como “Necesarias” se guardan en su navegador, ya que son esenciales para permitir las funcionalidades básicas del sitio web.... 

Siempre activas

Las cookies necesarias son cruciales para las funciones básicas del sitio web y el sitio web no funcionará de la forma prevista sin ellas.Estas cookies no almacenan ningún dato de identificación personal.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies funcionales ayudan a realizar ciertas funcionalidades, como compartir el contenido del sitio web en plataformas de redes sociales, recopilar comentarios y otras características de terceros.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies analíticas se utilizan para comprender cómo interactúan los visitantes con el sitio web. Estas cookies ayudan a proporcionar información sobre métricas el número de visitantes, el porcentaje de rebote, la fuente de tráfico, etc.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies de rendimiento se utilizan para comprender y analizar los índices de rendimiento clave del sitio web, lo que ayuda a proporcionar una mejor experiencia de usuario para los visitantes.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies publicitarias se utilizan para entregar a los visitantes anuncios personalizados basados ​​en las páginas que visitaron antes y analizar la efectividad de la campaña publicitaria.

No hay cookies para mostrar.

En el día del padre

El día de padre es para mí un buen día para agradecer y para reflexionar. Para  los que tenemos la suerte de ejercer como padres es una buena ocasión para valorar por unos momentos si estamos a la altura, aunque una mirada infantil, un silencio adolescente o una lágrima de adulto nos irán dando veredictos durante el camino.

Ser padres es probablemente una de las mayores responsabilidades de la vida, aunque no conviene vivirla como tal. Muchos empezamos a ejercer con los recuerdos como hijos aún íntimamente asentados bajo esa sonrisa con la que alzamos por primera vez a esas diminutas personas. Mientras contemplamos, a veces embelesados a veces atónitos por la fugacidad de los momentos, su crecimiento físico, intelectual y emocional. Mientras nos reconocemos en sus preguntas, experiencias y emociones y desde el amor más incondicional, como ya hicieron nuestros padres, nos equivocamos profundamente al pensar que lo sabemos todo.

Nada como tener hijos adolescentes , ya súper expertos en cuestionar, negociar, razonar y discutir para darnos cuenta de que no son nuestros hijos sino que nosotros, somos sus padres. Cuestión de perspectiva.

Ser buenos padres requiere empatía, amor incondicional, protección y exposición a riesgos controlados, educación en valores y espíritu crítico, conciencia del presente y vida plena, pero también  disfrute máximo de momentos y risas donde la vida se para, porque no hay nada más importante para ellos que ese momento, uno más para su colección de recuerdos de infancia feliz.

Démosles a nuestros hijos la oportunidad de crecer y aprender de nosotros y de todos. De lo correcto y lo incorrecto, a su criterio. Mostremos nuestra vulnerabilidad para enseñarles que son perfectos y completos, como todos. Invitémosles a discrepar con respeto, la edad del pavo es un período fantástico para descubrirse y descubrirnos. Sepamos ser más niños cuando toca para ganarnos su respeto al enseñarles a ser adultos . Nadie nace enseñado y aprender a ser padres, en mayúsculas a ojos de nuestros hijos, los herederos de nuestro legado emocional, es una de las grandes aventuras de crecimiento personal que la vida nos regala

En el día del padre pienso en mis hijos y en todo lo que esperan de mí, en todo lo que de niño aprendí y en mi padre y lo mucho que me gustaría tenerle aún aquí.