Cuarentones

Cena ritual de amigos cuarentones. Ha pasado un año desde la última vez pero ahí están, fieles a su cita. Algún kilo de más, algún pelo de menos y dudas y anhelos de futuro tan nuevos o tan viejos como la última vez que compartieron mantel. El comercial ambicioso a quien el mercado no responde, el directivo desmotivado por un sector que hace tiempo que le es ajeno, el freelance que se debate entre la libertad y su hipoteca, el gurú con solución para todo y para todos menos para sí mismo…

La conversación, como cada año, entre ironías y recuerdos infantiles de un pasado común en blanco y negro, deriva hacia sus nortes profesionales y proyectos y vacíos de futuro. En la conversación se debate sobre la crisis, los jefes despiadados, los empleados desmotivados, la falta de estabilidad de los puestos de trabajo y la de estrategia y coherencia de las mejores empresas, … en el fondo todo son quejas y análisis sobre factores externos dado que ninguno pone sobre la mesa en ningún momento si ha sido suficientemente crítico o ambicioso este año o si se ha focalizado suficientemente en sus objetivos si es que alguna vez ha llegado a tenerlos formalizados, sentirlos como propios y orientar su esfuerzo hacia ellos.
Necesitamos sentirnos parte de la tribu para compartir nuestras dudas y también nuestros ánimos, nos reconforta pensar que no somos únicos, agradecemos compartir criterios con aquellos cuya opinión respetamos y nos estimulan aquellos que provocan nuestra aletargada conciencia. Pero en el fondo, después de una buena cena, un botella de vino y unas cuantas risas,  sabemos que el lunes estaremos de nuevo sólos frente a nuestra pantalla, nuestros equipos y colaboradores, nuestros clientes, nuestros equipos, nuestros retos y especialmente frente a nosotros mismos. No hay mejor regalo que la opinión sincera de quienes mejor nos conocen ni mejor inversión hacia la superación que una introspección valiente y sincera. Inspírate en los mejores, aprende de los errores ajenos y especialmente comprométete contigo mismo. En tu próxima reunión anual con tus amigos tendrás mucho que aportar