Rosa brindó mirándoles a los ojos, como manda la tradición. Las copas chocaron en el centro de la mesa poniendo banda sonora a la emoción del momento. No fueron más de 10 segundos, tiempo suficiente para mirarles uno a uno, a los suyos, disfrutando de tenerles cerca. Su marido le guiñó un ojo con la complicidad de siempre. El año había sido intenso para ellos. A los cíclicos y exigentes retos profesionales se habían sumado lo mejor y lo peor también en lo personal. Atrás quedaban muchas vivencias, miles de horas, retos conseguidos y proyectos fallidos, promesas y frustraciones, sorpresas, primeras veces, ideas locas, encuentros y despedidas memorables, conversaciones relevantes y otras eternamente aplazadas, aciertos, errores y siempre aprendizajes, paisajes descubiertos y algunos por descubrir que engrosaban peligrosamente la lista del «algún día».
Todo había empezado una tarde 365 días atrás. Aquella cita consigo misma en que Rosa repasaba durante 3 largas horas sus objetivos, ilusiones y focos de atención para el 2018. Compromisos con los suyos, con otros y con ella misma. Lecturas, películas, experiencias y actividades con las que quería seguir engrosando su álbum de vida.
Acontecimientos que no podían pasar desapercibidos. Revisiones y decisiones financieras con cabeza , inversión en futuro con indulgentes concesiones al presente. Objetivos y foco inteligente en lo profesional, con omnipresencia de lo importante y gestión hábil de lo urgente y lo oportuno. Persistencia para conseguir y cintura para adaptarse. Crecimiento en su reto de pensar en grande y ser cada vez más valiente con sus miedos . Decisiones para soltar lo viejo, dejando espacio a lo nuevo y a lo desconocido. Acercamiento a personas y contenidos inspiradores y distanciamiento o desconexión de dementores y habitantes del estado de Quejas. Nueva mirada a los detractores con compasión y curiosidad de aprendizaje. Lista priorizada de hábitos saludables a incorporar y aún más importante , nocivos a abandonar. No todos a la vez. Retos semanales. Paso a paso.
Esa tarde de diciembre era una de sus citas periódicas e ineludibles con la reflexión individual de calidad. Un paseo desde las intenciones a la convicción para seguir avanzando en la vida que se había prometido tener. En ella no faltaba la atención a su salud en sentido amplio, el reconocimiento y cuidado de sus fuentes de energía y los compromisos de dedicación a sus cómplices de vida, el entorno que hacía años la acompañaba de forma serenamente imparable hacia la plenitud.
La voz insistente de su hijo pequeño devolvió a Rosa al presente. Un entusiasta primer plano de alegría infantil. El aquí y ahora. Cuánto había aprendido de sus hijos !
El pequeño Bruno le tiraba del brazo y la almohada mientras le pedía:
– Mamá ! Despierta ! Máma ! Salimos a patinar ?
Aquel niño ilusionado con patines nuevos era el mejor despertador para Rosa ese martes soleado, 1 de Enero de 2019. En el comedor sonaba de fondo el concierto de año nuevo. Esa banda sonora que la invitaba cada año a ser la mejor directora de su vida. Sólo Von Karajan o Barenboim podrían estar a la altura de la marcha que acababa de engranar para iniciar, una vez más, el mejor año de su vida, la marcha Radetzky.
Feliz 2019 a todos !!!
Molt gran, Joan. Molta marca i molta marcha… personal.
Abraçada i que el 2019 el seguim gaudint!
Guillem
moltes gràcies Guillem. Que així sigui
Molt interessant Joan i enhorabona per adivinar que dema 1 de Gener del 2019 será un martes soleado, que aixi sigui i ens ilumini la resta del 2019 que de ben segur será un gran any ¡¡
Gràcies Antoni! Que l’optimisme ens inspiri desde el primer dia ! Bon any
Parar, ilusionarse, apasionarse … una vez más!! #elqueempiezaeselmejor Bon any a tothom!!!
Así se habla. Bon any nou César !
Reblogueó esto en El blog de Miriam Baucells.
Gràcies per compartir Miriam. Bon any !
Molt bon any Joan!
Bon any colega!
Igual Ment !
Feliz año Joan! Qué bonito texto para empezar el año. Un abrazo
Muchas gracias Ami! Feliz año para ti también. Hagamos que sea el mejor
Muy buena reflexión.
Nunca es tarde para desear buen año y que todo vaya bien.
así es ! gracias por leer y aportar Loretta